El Rojo se impuso por 2-1 y alcanzó la definición gracias a los goles convertidos en la derrota en Quito por 3-2. Parra y Fredes marcaron para los de Mohamed, mientras que Salgueiro había igualado para los ecuatorianos.
Aquellos goles convertidos en Quito terminaron siendo más que importantes para Independiente. Es que ese 2-3 en Ecuador, más el 2-1 conseguido esta noche frente a la Liga de Quito, le permitieron al equipo de Avellaneda alcanzar la final de la Copa Sudamericana. La semana que viene jugará frente a Goiás, en Brasil.
Fue flojo el primer tiempo (casi todo el encuentro). A Independiente le costó muchísimo generar juego asociado, se mostró demasiado impreciso y, más allá de tener tres delanteros en cancha (la apuesta de Antonio Mohamed por Martín Gómez no funcionó), sólo inquietó a Liga por la siempre fundamental pelota parada.
A los 13m, Leonel Galeano avisó con un cabezazo que encontró las manos de José Cevallos y, a los 26m, el Rojo se puso en ventaja: la bajó el mismo Galeano y convirtió Facundo Parra. Dos cabezazos en el área, otra vez, terminó en gol.
Después de la apertura del marcador, el equipo conducido por Mohamed se amigó con el balón y estuvo muy cerca del segundo, en una jugada en la que se lo perdieron Parra y Andrés Silvera. La Liga no se aproximaba a Hilario Navarro y se mostraba cansado, seguramente sintiendo el trajín de los sucesivos partidos que tuvo que disputar (el lunes y martes jugó dos encuentros por el torneo ecuatoriano).
El primer tiempo se iba e Independiente recibió un tanto que no esperaba. A los 44m, Hernán Barcos casi lo iguala tras un centro de Chila y, a la jugada siguiente, el uruguayo Juan Manuel Salgueiro sacó un zurdazo que se metió junto al palo izquierdo del arquero correntino.
Si alguno pensaba en que Independiente podía sentir el impacto por el gol de Salgueiro, la Liga se encargó de darle tranquilidad al regalarle el segundo: no había pasado ni un minuto del complemento cuando Patricio Urrutia quiso salir jugando, le obsequió la pelota a Hernán Fredes y el mediocampista superó a Cevallos con un tiro rasante.
Como había ocurrido en el primer tiempo, el local tomó confianza después de la conquista y se aproximó al tercero con un par de remates desde afuera de Silvera. Le duró poco, ya que volvió a caer en la desprolijidad, la imprecisión y el nerviosismo. Recién a la media hora creó otra vez peligro, por Galeano, nuevamente después de un tiro libre.
Sin demasiadas ideas, la Liga de Quito fue a buscar el empate y estuvo a punto de conseguirlo a los 38m con un remate de Gámez que pegó en el palo izquierdo. En el descuento, Navarro se quedó con el intento de Barcos. El resultado no se modificó e Independiente está en la final. La Copa tendrá nuevo campeón.
Viernes, 26 de noviembre de 2010