La presidenta Cristina Fernández de Kirchner convocó a los jóvenes a "seguir adelante con fuerza, esperanza, optimismo, porque la risa no se rinde y la Argentina tampoco", al dar inicio a las obras de una autovía que comunicará Concordia con Paraná, desde donde estableció contacto -vía teleconferencia- con Paraná para dar inicio a las obras de una autovía, y luego con Corrientes para dejar inaugurado el acceso de la Ruta 9.
Por otra parte, la presidenta Cristina Fernández de Kirchner le pidió a los dirigentes políticos que "superen las diferencias" y la acompañen en la tarea de "profundizar el modelo" iniciado en 2003.
"Estoy convencida de que necesitamos seguir profundizando este modelo. Aquí puede visualizarse con mucha claridad: en el 2003 Concordia era noticia en el orden nacional por ser la ciudad con mayor índice de desocupación del país y hoy está por abajo del índice nacional en materia de desocupación", destacó.
La mandataria señaló que esta situación "es obra de un proyecto nacional y modelo que ha puesto el acento en la producción, en la generación de parques industriales para que cada pueblo genere valor agregado en su lugar de origen, de trabajo a sus hijos y no se tengan que ir a los grandes centros urbanos".
En otro tramo de su discurso, en el que recordó en varias oportunidades la obra del fallecido ex presidente Néstor Kirchner, la jefa de Estado dijo que necesita "ayuda porque sola no puedo..." y agregó: "necesito hombres y mujeres que se hagan carne y sean capaces de interpretar este proyecto nacional que tanto debe seguir dando a los argentinos".
"Necesito dirigentes que me acompañen en cada uno de los lugares, en los que se hagan carne de este proyecto. Hombres y mujeres que crean que es necesario seguir trabajando cada vez más y no seguir poniendo piedras en el camino", dijo.
"Dirigentes que sepan interpretar este momento histórico, que entiendan que cuando le va bien al pueblo es necesario que superen diferencias porque cuando las cosas empiezan a ir mal, después los dirigentes se empiezan a echar la culpa y le termina yendo mal a la sociedad", añadió.
En su discurso, la mandataria recordó cuando el pasado 30 de septiembre el fallecido ex presidente visitó Concordia, en representación suya.
"A él (Néstor Kirchner) le gustaba ver a la gente feliz. Era un hombre que creía profundamente en la alegría, el optimismo, con fe y esperanza, con ideas profundas", remarcó.
También recordó a Kirchner cuando señaló: "cada vez que me dicen `Fuerza Cristina`, yo siento que me llega la fuerza de él".
Asimismo agradeció en su discurso especialmente al gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, que "bancó todo en los peores momentos y lugares".
"Tenemos que hacer un esfuerzo los dirigentes por superar las diferencias porque el rencor y el odio no ayudan a construir. Se construye desde el amor y corazón; esa es la única forma, como lo hacía él", expresó la Presidenta.
Cristina indicó asimismo que "nunca un presidente había sido tan atacado, agraviado, insultado y pienso que tenerlo a él me permitió sobrellevarlo" y agregó que "la fuerza, convicción y el sacrificio que se lo terminó llevando me debe llevar a tener cada día más temple, entereza, serenidad, firmeza, compresión, dedicación y generosidad para seguir trabajando por este proyecto".
"No dar un paso más atrás, nunca menos de las cosas que hemos logrado, y que nos ha costado mucho conseguirlas. Debemos cuidarlas valorarlas y profundizarlas", concluyó su discurso la primer mandataria.
Sábado, 19 de marzo de 2011