El interno está asistido con respirador. La familia acusa a un grupo de tareas denominados los “hombres de negro”. El jefe del SPP negó que haya habido una “paliza” por parte de los agentes y que se trató de un enfrentamiento entre presos. Abrieron investigación.

No se saben los motivos. Los familiares nunca fueron informados. Lo cierto es que al menos 4 internos de la Unidad Penal Nº 6, anexo Condenados, habrían sido objeto hace casi 15 días de una descomunal paliza propinada, según aseguran sus familiares, por efectivos del Servicio Penitenciario Provincial. Uno de los reclusos se encuentra en coma farmacológico, otros tres siguen en el pabellón, “sin recibir asistencia médica y con sus rostros irreconocible y su cuerpo todavía con las huellas de la paliza”, aseguran los familiares. Por su parte el jefe del SPP, niega esa versión y dice que, “fue una pelea entre internos”.

La hermana y la madre de dos de los internos llegaron hasta época, para contar lo sucedido y revelaron que a pesar de que han pasado 15 días del hecho, “aún no hemos sido informados por el SPP del incidente y del estado de nuestros familiares, hayan sido ellos o no los causantes, lo cual ya es un hecho gravísimo, teniendo en cuenta que tampoco han comunicado a la Justicia”, indicó Roxana Sánchez, hermana de Raúl Abel Sánchez (30), quien se encuentra internado en el área de cuidados intensivos del Hospital Escuela.

Sánchez está condenado a reclusión perpetua por homicidio y según refiere su hermana, hace algún tiempo había sido trasladado desde el Penal Nº 1, al costado del puente Gral Manuel Belgrano, hacia la Unidad Penal 6 en San Cayetano.

Roxana dijo que recibió información de que su hermano fue brutalmente torturado por los “hombres de negro”, varias veces mencionado en denuncias realizadas por familiares de los presos y la Red provincial de Derechos humanos, como un “grupo de choque encargado de las requisas violentas y las palizas a los internos”.

El relato que brindó Roxana se asemeja al descripto por Patricia Barrios, madre de Damián Barrios (30), otro interno al que esa misma noche, del domingo 15 de enero tuvo como objetivo el “grupo de tareas del SPP”. Los propios compañeros del pabellón dijeron que los ataron de pies y manos con las esposas y los golpearon indiscriminadamente. Sánchez tuvo que ser hospitalizado. “Mi hijo está irreconocible, no lo atendieron y no le permitían las visitas. Me llamó por teléfono para que lo vaya a ver y apenas se le entendía lo que hablaba. Jamás nos informaron que sucedió”, dijo Patricia a época.

Por su parte Hilda Presman y el abogado Hermindo González, ambos de la Red Provincial de Derechos Humanos, aseguran que los propios internos denunciaron a un oficial, como el encargado de comandar a los “hombres de negro”.

Tras la denuncia formulada ayer ante el fiscal de instrucción Buenaventura Duarte, la hermana de Sánchez logró que a su hermano, que se encuentra en coma, se le retiren las esposas, con las que lo tenían asegurado a la camilla cuyas fotos obran en poder de este medio. El preso se encuentra asistido con respirador artificial y “su estado es gravísimo”, según el parte brindado por el propio director del hospital Escuela a Roxana Sánchez.

Consultado por época, Miguel Ángel Domínguez, jefe del Servicio Penitenciario Provincial confirmó que hubo un incidente, al mismo tiempo que en el Penal 1, y que al igual que allí, “el personal debió interceder, ya que los internos se estaban golpeando con violencia”. También reconoció que hubo golpes por parte de los agentes del Servicio, pero no excesos y fueron para ordenar el caos.

En cuanto a la cantidad de heridos asegura que fueron dos, Sánchez y Barrios y reconoció que pudo no haber notificación que debió partir de la dirección del Penal Nº 1, al que le dependen los internos

Martes, 31 de enero de 2012