Luego del provocador llamado del piquetero D´elia a una movilización a Plaza de Mayo, en apoyo al gobierno de Cristina Fernandez, lanzando consignas y denuncias que mas tenían que ver con un plan de batalla, desde diferentes puntos del país la gente salió a pedir que se restablezca el dialogo entre gobierno y productores.

Manifestantes se concentraron esta noche en diferentes esquinas porteñas, el Obelisco y el Congreso nacional, en repudio a la política del Gobierno hacia el campo. Además, hubo protestas en el Gran Buenos Aires, así como en Córdoba, Rosario, Mendoza y Mar del Plata, entre otras ciudades. Las movilizaciones, que en algunos casos fueron de gran magnitud, impactaron principalmente por la cantidad de puntos en que se llevaron a cabo.

Los cacerolazos se sumaron esta noche con fuerza, de la mano de masivas movilizaciones en Capital, el Conurbano y el interior, a la pulseada entre el Gobierno y el campo. Las protestas fueron en muchos casos de gran magnitud, pero impactaron principalmente por la cantidad de puntos en que se llevaron a cabo.

En Capital, las movilizaciones se iniciaron poco después de las 20. La esquina de Santa Fe y Callao reunió con rapidez a un importante número de manifestantes. Las protestas se extendieron de inmediato a distintos barrios del norte y del centro-oeste de la Ciudad: las cacerolas sonaron con fuerza en Cabildo y Juramento, Angel Gallardo y Honorio Pueyrredón, así como en Acoyte y Rivadavia.

La Quinta de Olivos también fue escenario de las protestas. Allí se vieron banderas argentinas, bocinazos y carteles contra la política oficial hacia el campo. Además, se registraron movilizaciones frente a la Municipalidad de San Isidro y en Martínez, entre otros puntos de la zona norte.

También hubo fuertes protestas en Córdoba, Rosario, Mendoza y Mar del Plata, entre otras ciudades claves del interior. La escena se repitió en los principales cortes de ruta, donde vecinos se sumaron a las protestas que llevan a cabo ruralistas y transportistas autoconvocados.

Si bien no hubo pronunciamientos públicos, Clarín.com pudo saber que la magnitud de la protesta generó en el oficialismo dos lecturas. Al respecto, fuentes cercanas al jefe de Gabinete, Alberto Fernández, calificaron las movilizaciones como un pedido para que el Gobierno y el campo reinicien el diálogo. En el sector más duro del kirchnerismo, sin embargo, trataron de bajarle el tono al reclamo y lo vincularon a los sectores que se oponen a una redistribución del ingreso.
Fuente: Clarin

Martes, 17 de junio de 2008