Corrientes (18-8-17): La llamada Escuela de Gobierno, ubicada en la calle Buenos Aires, fue el centro de una convocatoria a quienes tendrán responsabilidad en la campaña electoral para las elecciones del 8 de octubre. El coordinador general es Gustavo Rodríguez, cuya figura viene creciendo en el firmamento radical, aunque con naturales resistencias. La cumbre levantó polvareda.
Primero, en el Concejo Deliberante; luego, en la Legislatura, donde se hacía el recuento. Y finalmente se extendió a la primera y segunda línea de la UCR en función a que hubo dirigentes reconocidos que no fueron invitados y que dejaron trascender su malestar.

En los dos meses venideros, todo el Gobierno será puesto al servicio de la campaña más difícil que enfrentará el oficialismo. Apuestan a que los funcionarios se involucren. El responsable de la Escuela de Gobierno comandará la escuadra oficialista, aunque no todos le reconocen jinetas. Si es válido que las cosas se miden por sus resultados, habrá que esperar la noche del 8 de octubre.

Encuentro por Corrientes y la UCR tienen un debate abierto por la conformación de la grilla legislativa que por primera vez en muchos años ha generado un grado de tensión que va en línea, primero con la licuación del poder de Colombi; y segundo, por la incertidumbre respecto a los resultados de las elecciones del 8 de octubre, que viene en aumento a partir de la confirmación de la conjunción de Camau con Nito y los números de las Paso, que reflejaron una ecuación 54 a 45 de los aliados del PJ contra la lista del Gobierno.

La frazada es corta y los lugares no alcanzan para compaginar una lista que cobra las expectativas. La realidad política se palpita dentro de ECO y del propio radicalismo, que apunta a hacerse fuerte en el Senado, reservándose sólo dos escaños en diputados. Busca con los demás satisfacer a los socios, muchos de los cuales quedarán en lista de espera, sin expectativas salibles.

De ahí el manejo de los tiempos que hace Ricardo, un hábil jugador del hecho consumado que fue la razón determinante de apostar a jugar sus fichas en el anticipo de las elecciones de Capital, descartando el desdoblamiento legislativo que hubiera producido heridas anticipadas difíciles de restañar.

En el universo ucerreísta parece claro que "Peteco", en forma directa o a través de un delfín ocupará una de las bancas; en tanto, la otra sería para un jugador del senador Noel Breard, uno de los principales timoneles en el Senado y cuyo trabajo político en el Interior y en la Capital lo ha convertido en una pieza clave del andamiaje oficialista. Los que sabe reconocen en el legendario cacique radical el carácter de operador todoterreno, quizás el más influyente dentro de un Poder Judicial que da signos de agotamiento frente al Gobierno.

El encuentro que disparó fuertes reacciones
A la hora de las responsabilidades, fue Gustavo Rodríguez quien quedó en la mira por las no invitaciones a muchos caracterizados exponentes del universo de campaña.

Por lo que luego se supo no se trataron de ausencias, sino de que la lista de invitados incluyó a unos y excluyó a otros. Una disquisición que, aunque hace a la operatividad de la campaña, muestra que nada será fácil en este turno electoral en el que Colombi se está despidiendo del poder.

Entre los presentes estuvieron, entre otros, el intendente electo de Capital, Eduardo Tassano y el presidente de la UCR provincial, Sergio Flinta. Aunque ninguno de ellos parece haber tenido que ver con las no invitaciones que generaron malestar.
Fuente: El Libertador

Viernes, 18 de agosto de 2017