Con el nombre de Intrinsa se ha comercializado el fármaco para combatir la falta de deseo sexual en las mujeres con menopausia precoz, es decir, la que se produce por la extirpación de ovarios. Sin entrar en matices, podríamos pensar que por fin, después de tanta leyenda urbana, sobre supuestos afrodisíacos, en las farmacias se podrá conseguir un verdadero remedio para la falta de deseo sexual femenino.

De entrada ya hay quien lo ha denominado la Viagra femenina, haciendo paralelismo con el éxito para la salud sexual del hombre que ha tenido su homónima para el varón. Huelga decir que los fármacos vasoactivos que se utilizan en terapia sexual masculina, no son afrodisíacos, si el hombre no experimenta deseo, no se produce la erección.

Desgraciadamente Intrinsa, tampoco es la panacea. Se trata de un parche que libera testosterona y hace que la mujer mantenga niveles de andrógenos similares a los que tendría si no le hubieran extirpado los ovarios. Los andrógenos son responsables hormonales de que mujeres y hombres mantengan su deseo sexual, si bien los hombres requieren mayores cantidades.

Mantener un buen nivel hormonal es una condición necesaria para el deseo sexual, pero no suficiente. Los mecanismos del deseo sexual, especialmente el femenino, son extremadamente complejos. Los estilos de personalidad, la actitud ante el sexo, la relación con la pareja, son factores que tienen una clara influencia en la vida sexual. El parche puede ayudar a muchas mujeres que sienten que su deseo disminuye radicalmente a consecuencia de la menopausia precoz.

Los efectos secundarios más importantes son la aparición de vello facial y la irritación de la zona donde se pegó el parche. En los estudios presentados las mujeres siguieron utilizando el parche, a pesar de estos efectos secundarios, ya que valoraron muy positivamente el efecto sobre su vida sexual.

La cuestión ahora es, ¿Lo pueden tomar todas las mujeres? Sencillamente no, el fármaco tiene indicaciones muy claras y precisas, y en este caso solamente está autorizado para mujeres con menopausia precoz. Además, si a las mujeres les funcionan los ovarios y tienen niveles hormonales normales, no tiene ningún sentido esta terapia, ya que lo único que hace es restablecer el equilibrio hormonal.

Por nuestra parte, damos la bienvenida a este nuevo recurso terapéutico, que integrado en un proceso de orientación o terapia sexual puede beneficiar a muchas mujeres. Pero entendemos que en el contexto clínico, además del uso del parche, se deberían abordar otros factores muy importantes en el deseo sexual femenino como la relación de pareja y el afrontamiento de múltiples estresores (laborales, familiares, etc.)Sería penoso desaprovechar este buen recurso por no atender estos componentes del deseo sexual tan decisivos como los niveles hormonales.

Como mujer ¿crees que te gustaría tener más deseo sexual? Como hombre, si tienes pareja ¿Te gustaría que ella sintiera más deseo sexual? ¿Qué te parecen estos parches? ¿Los utilizarías?


Sábado, 16 de mayo de 2009