El categórico e inapelable triunfo del Intendente Vischi en Paso de los Libres, cosechando un 70 % de los votos merece un análisis profundo, al igual que el rol que le cupo a los demás contrincantes, el mismo tiene sin dudas un gran condimento sociológico además del fríamente electoral.
El porque la ciudadanía libreña votó por “Peteco” será el tema a debatir hasta por lo menos las elecciones a Gobernador, mucho se dirá, especulaciones por doquier sobre el comportamiento de los ciudadanos, pero el hecho concreto, y que trataremos de darle un análisis ecuánime y sin pasiones, es que el pueblo voto por seguir en el mismo rumbo en que estamos.
Por alguna razón las quejas de los vecinos por la falta de obras en distintos lugares de la ciudad y el abandono en que diversas zonas de la periferia se encuentran, no tuvieron su correlato en el voto, la gran mayoría de la gente prefirió votar para que se sigan cometiendo irregularidades, que la obra pública la hagan los amigos, que se escondan los casos de perros enfermos o que se fumigue con remedios vencidos, que se asfalten cuadras que después hay que repararlas, que se gaste una fortuna nunca vista en Paso de los Libres de los dineros de la gente para la campaña, es sin duda alguna un hecho digno de estudio y que está básicamente asentado en la efectiva campaña publicitaria que se encaró desde la comuna.
Definitivamente Vischi logró convencer a la ciudadanía de que lo que hizo lo hizo muy bien, y también que hizo cosas que ni siquiera existen, el esquema publicitario fue una maquinaria suiza, se invirtió donde había que invertir, y se dijo lo que había que decir, uno puede estar de acuerdo o no con la forma en que se llevó a cabo esta campaña, pero bajo ningún punto de vista se puede decir que la misma no fuera efectiva y que el “soberano” votó lo que creyó correcto.
Desde el punto estrictamente electoral no se puede agregar otra cosa que la gente lo votó a Vischi, las otras expresiones o colectoras fueron beneficiadas por la figura del intendente libreño, que inclusive trabajó apoyando a las listas colectoras, apoyo que se tradujo en que su figura terminó catapultándolas con una suma interesante de votos, la gran mayoría de los cuales fueron en apoyo a Vischi y no hacia los candidatos a concejales.
Un triunfo de esta magnitud comparable solamente con los de Fernando Lahoz, con 10000 voluntades o de Eduardo Sanabria con 12000, es inapelable y como ya dijimos anteriormente trasciende el ámbito estrictamente electoral para convertirse en materia de estudio sociológico.
También este “Petecazo” dejó bastante hilo para cortar en las huestes del Frente de Todos, en donde inexplicablemente se hizo todo para complotar contra la candidatura de Juan Legarreta, desde poner como candidato a primer concejal a una figura que concita una mínima preferencia electoral, Edgardo Vischi, y al referente del Partido Liberal, Dionicio Velazco; quienes se vieron inmersos en una interna cerrada con la colectora del PRO que llevaba al liberal Carlos Gatti y al radical Schiro, ambas partes en forma permanente se autotitulaban como los mejores liberales o radicales, sin tener en cuenta que llevaban la misma fórmula. El hecho del Partido Liberal es más patético aún, pareció que la intención de la colectora era principalmente restarle votos a Velazco y no sumarle a Legarreta, en definitiva se siguió con la inconciente pelea interna, cuyos resultados están a la vista un Frente de Todos con un paupérrimo 2100 para concejales, que hace peligrar la inclusión de Edgardo Vischi al Concejo, y un Partido Liberal que no habría llegado a sumar entre las dos facciones 1000 votos, producto por supuesto de la irresponsabilidad de llevar una interna a una elección general.
Por el lado del Justicialismo la primer lectura lleva a tener en cuenta que el partido de Perón aumentó en relación a la elección anterior mas de 1000 votos y en relación a la de cuatro años atrás, donde prácticamente desapareció con escasos 600 votos, mantuvo un aumento del 500% con casi 3000 votos. Por supuesto que las expectativas no eran las que se dieron, pero luego del paso del vendaval “Peteco”, poco y nada quedó para repartir entre los otros partidos políticos.
El mérito del peronismo es que contra todos los pronósticos fue solo a una elección y siguió creciendo, muy lentamente por cierto, pero viene manteniendo un crecimiento constante elección tras elección y hoy lo coloca como el segundo partido de Paso de los Libres, muy lejos si de los números cosechados por la UCR, pero como todo en política tiene su vuelta.
Sin dudas el peronismo luego de mucho tiempo comenzó a andar un camino de conciliación y por sobre todo de responsabilidad teniendo como norte el restablecimiento de su propuesta en la comunidad, que de hecho ya comenzó a dar sus frutos los cuales quedan minimizados por los números de la elección.
El justicialismos sacó en Paso de los Libres 2733 votos, hacer el desagregado de las tres boletas con las cuales se votaba a “Lali” Giorgio, es hasta irresponsable y obedece a motivos que nada tiene que ver con lo político, las tres boletas las repartió el peronismo libreño y mediante eso se logró el resultado que se vio el domingo pasado, la boleta del PJ, la del Frente Libreños por el CAMBIO y la de Acción Popular, cuentan en un solo sentido ya que fueron repartidas con un solo destino.
El hecho de que hayan habido dirigentes que no trabajaron en la elección con la estructura orgánica del partido, no influyó, ni influiría en el resultado final, ya que es evidente que quienes se alejaron buscaron siempre posicionamientos personales y no el fortalecimiento del partido y trabajar en pos de la comunidad. “Si yo no soy me voy” pareciera que dijeron algunos, y se fueron y nada pasó. Si hay quienes pretenden adjudicar el resultado del domingo, que por cierto no fue malo, no el esperado pero no malo, a la falta de acompañamiento de algunos dirigentes, algunos de los cuales pretendieron ser candidatos aunque no pudieran serlo por impedimento constitucional, u otros que “caminaron” mientras tenían posibilidades de serlo, y luego no aparecieron más, o quienes mandaron a algún puntero a trabajar para el Intendente Vischi, no están entendiendo nada de lo que pasó, el peronismo fue con lo que tenía atrás de un objetivo mayor, y quienes se fueron tenían como objetivo su posicionamiento personal.
Mucho hay todavía para ajustar a un análisis, con el correr de los días se irán desgranando los mismos, pero algo ya es cierto se largó la carrera para la gobernación.
Miércoles, 1 de julio de 2009