Paso de los Libres (5-9-22): Se hablan, comparten actos juntos, mantienen las formas, pero la designación de “Chelo” Sincovez al frente del Comité de la UCR local, agrietó la relación política entre Gustavo Valdés y Eduardo Vischi. El fraccionamiento del espacio opositor. El eje Agustín Faraldo - Ana Miño. ELI, el nuevo espacio que asoma de la mano de Cecilia Sanabria. El PJ sin sobresaltos, ni internas partidarias a la vista. La reagrupación de Unidad Ciudadana.
Foto: "Chelo" Sincovez, "Muñequito" Valdés y "Peteco" Vischi
Por Ignacio Villanueva

No es novedad para nadie, los tirones y fricciones existentes, entre Valdesistas y Ricardistas, en la cúspide del poder provincial.

La historia de diferencias sería larga de contar, pero tiene sus efectos colaterales, por estos pagos.

Cuentan que la relación política entre el Gobernador de la provincia, Gustavo Valdés (UCR) y el Senador Nacional Eduardo Vischi (UCR), no está pasando por su mejor momento, pese a que comparten juntos, actos institucionales.

En el entorno del mandatario provincial, desconfían de la “autonomía política con la que se mueve el legislador Libreño”, y existe el recelo de “que jamás cortó el cordón umbilical con el hombre fuerte de la UCR provincial, Ricardo Colombi”.

Una interpretación de quien escribe este artículo, es que podría tratarse mas bien de un “celo político más de tono generacional”.

Pero el hecho que ahondó las diferencias entre ambos, fue la designación de José “Chelo” Sincovez” al frente de la UCR local. Éste último, hombre de indudable pertenencia a “Peteco” Vischi.

En cercanías del Gobernador, aseguran “que el Comité Libreño, sigue en las mismas manos de los de siempre, sin recambio generacional”.

Pero la discordia no queda ahí, agregan que la no invitación a “Yeyé” Schiro, para formar parte del Comité, generó más malestar. Es que Schiro, es considerado uno de los hombres de mayor confianza y llegada al mandatario provincial.

Alrededor de Sincovez, los rumores llegaron, pero sostienen que “nadie formalmente manifestó el desacuerdo”.

Lo cierto, es que el Gobernador, disminuyó notablemente sus visitas a Paso de los Libres, respecto de anteriores años (solo vino una vez este año, a finales de abril), y nadie puede negar que en política también deban leerse los gestos, señales, presencias y ausencias.

No hay ruptura política, pero sí un enfriamiento de las relaciones, que se evidencia en la inacción del Comité, la falta de agenda pública del principal partido del gobierno provincial. “Nos dejaron sin herramientas políticas”, reconocen allegados al Comité.

Por otra parte, no pasan inadvertidos los movimientos políticos de Agustín Faraldo y el despliegue que tuvo en distintos eventos. “Agustín avanza, y lo hace con el aval del gobernador”, se escucha decir en su entorno.

Faraldo está dispuesto a tener juego propio y no repetir errores. En su marcha, recoge heridos de la estructura radical, y propios que habían quedado en el camino, luego de la fallida alianza electoral del año pasado.

Para el 2025, que es su mayor objetivo, aún falta, pero en la “coyuntura”, sumó una aliada “táctica”: Ana Miño.

La edil profesa la “fe Valdesista”. Referente del partido “Vamos Corrientes”, juega de “líbero” en el equipo de ECO; conformó un eje político con Agustín Faraldo, sin embargo, no deja de mirar con atención como se mueve el tablero en la interna radical. Mientras tanto, gana tiempo, para resolver que hará con su futuro político. Tiene mandato hasta el 2025.

Un tercer espacio en ECO, más incipiente, pero en proceso de construcción, es Encuentro Liberal (ELI).

Luego del “fiasco” político-electoral del partido, de la mano del exconcejal Carlos Gatti, y tras 9 años de existencia de la fuerza política, no solo no logró retener la banca en el Concejo, sino que además no pudo presentar candidatos en la alianza.

La irrupción de la dirigente Cecilia Sanabria y su equipo, en el partido de las “Hormiguitas”, cambió la impronta y “oxigenó” un partido, que se encontraba “anquilosado”. Desde ese nuevo espacio, se generaron canales de comunicación política, con otros partidos del espectro de ECO. ¿El futuro político de Cecilia Sanabria? Vaya saber, el tiempo dirá.

Muchas respuestas, de la fraccionada oposición, podrían encontrarse la próxima semana, si llega a concretarse la visita de Valdés a Paso de los Libres, con motivo del aniversario de la ciudad. El foco político estará puesto en sus movimientos y gestualidad, hacía el interior de ECO.

Por su parte, el peronismo gobernante a nivel local, atraviesa un 2022 sin sobresaltos.

La tan mentada interna partidaria, se la mandó al freezer hasta nuevo aviso, claramente no será este año, y existen dudas sobre la concreción, el año venidero, donde seguramente argumentarán la prioridad de otras cuestiones.

“Este es el mejor escenario de tranquilidad política”, se escucha decir en el ámbito del palacio municipal.

De todos modos, los posicionamientos políticos existen. Uno es el de Sebastián Pardo, actual Secretario de Seguridad del Municipio, que comenzó a recorrer la zona, con vistas al 2023, eventualmente por un lugar en la legislatura provincial.

A quien lo quiera escuchar, Pardo repite, que “lo hace para mantener en movimiento al partido” y siempre “bajo el paragua político de Martín Ascùa”.

Igual la cuestión no es tan sencilla.

En verdad, el actual Diputado Provincial Miguel Arias (PJ), uno de los hombres del proyecto político del intendente Martín Ascùa, logró un reconocimiento del Frente de Todos, por su intensa labor legislativa, lo que lo convierte en un candidato siempre expectable para renovar la banca. Su mandato finaliza el 10 de diciembre del 2023. A propósito de Arias, el pasado 26 de agosto, se cumplió el primer aniversario, del intento de asesinato que sufriera en la localidad de Tapebicua, en el marco de un cierre de campaña electoral, sin que se registren avances en la investigación judicial.

Volviendo al tema de las candidaturas del año próximo, sin mucho ruido ni estridencias, no hay que descartar a Celeste Ascúa (PJ) en una candidatura en otras ligas mayores, siempre en el plano legislativo. Una cosa es segura, la JP no se quedará cruzada de brazos a la hora de las definiciones. Celeste vence mandato como concejal el 10 de diciembre del 2023.

Aunque de eso todavía no se habla en el oficialismo, ni es motivo de tensión, y como decía el General Perón “todo en su medida y armoniosamente”, la última palabra la tendrá el jefe comunal, Martín Ascúa (PJ).

Hay más. Una agrupación en el peronismo que trabaja sigilosamente, a pie firme, y va consolidando territorio, es Unidad Ciudadana.

La agrupación la lidera, la ex Senadora Nacional, Ana Almirón (La Campora), que visita periódicamente la ciudad.

En el último Festival del Guiso, se mostró junto al intendente Ascúa, con quien cultivó una muy buena relación, pero a la vez reagrupa fuerzas y no descuida su vínculo permanente con organizaciones sociales y políticas.

En el núcleo de ese espacio político, no descartan ninguna posibilidad, ni siquiera la de armarse para competir eventualmente en una interna partidaria.

El horizonte del 2023, aún es lejano, pero como dice Ricardo Colombi "esta es una carrera de velocidad y resistencia", en la cual llegarán los más fuertes.

Por Ignacio Villanueva

Lunes, 5 de septiembre de 2022