Bs. As. (7-8-24): Una demostración de fuerza del arco opositor obligó al gobierno a negociar luego de que el presidente tratara de "degenerados fiscales" a los legisladores que propugnan que las jubilaciones no pierdan ante la inflación.
Ahora la pelota quedó en manos de la vicepresidenta Victoria Villarruel, que deberá definir la fecha de la próxima sesión de la Cámara Alta, pero desde este miércoles tiene dos dictámenes para tratar en el recinto una reforma de la movilidad jubilatoria. Luego de una hora y media de exposiciones, finalmente fueron firmados dos dictámenes.
El que impulsó el oficialismo, con el respaldo de bloques dialoguistas, mantiene la actualización por inflación y aceptó el empalme del 8,1 para equilibrar la pérdida de enero. Pero es el que tiene menos firmas de los dos. El segundo, impulsado por el kirchnerismo junto a un grupo de radicales y partidos provinciales, es el dictamen de la mayoría e insiste con el giro que vino de Diputados: mantiene la garantía para que los jubilados no cobren por debajo de la canasta básico del adulto mayor y abre el pago de las compensaciones que la ANSeS le debe a las 13 cajas provinciales no transferidas a la Nación.
De este modo llegará al Senado un proyecto que fue aprobado en Diputados a partir de una demostración de fuerza de todo el arco opositor, que reunió 160 votos, es decir, dos tercios del recinto. Cuando el presidente Javier Milei se enteró de la media sanción, trató a los legisladores que votaron a favor como «degenerados fiscales» y dijo que vetaría el proyecto.
Este miércoles el oficialismo concedió cambios para evitar el veto, pero no fue suficiente, porque volvió a rearticularse ese arco opositor y llegará al recinto cuando Villarruel lo decida. Si el dictamen de mayoría es aprobado, la iniciativa que vino de la Cámara Baja será transformada en Ley y es posible que Milei busque dejarlo sin efecto, en una nueva pulseada con el Congreso, con final abierto.
Miércoles, 7 de agosto de 2024