Coordinados entre sí, distintas áreas municipales llevan adelante los trabajos más urgentes que demandan las consecuencias producidas por el fuerte viento y la importante cantidad de agua caída en el intenso temporal que azotó a la ciudad desde horas muy tempranas. Obras Públicas, Defensa Civil, Higiene Urbana, y Desarrollo Social, entre otras dependencias municipales, trabajan en conjunto para asistir a las personas que debieron abandonar sus casas por la presencia de agua en las mismas.
Ya se contabilizan casi 2000 personas evacuadas, que todavía no son totalmente ubicadas en los centros de evacuación debido a la demora que existe en la habilitación de escuelas para este destino. Los barrios más afectados por los anegamientos, que generaron los más de 120 milímetros de agua caída en poco tiempo, son el Pujol, Sapucay, Cremonte, Bañado Sur, Arazaty y la Olla. En este último asentamiento se ubica el grueso de los evacuados, donde ascienden a más de 1000.
En tanto, los fuertes vientos dejaron como consecuencia el derrumbre de árboles y columnas de alumbrado público, como así también el destrozo de otras estructuras como ser carteles y postes de otros servicios con su respectivo cableado. Desde el Municipio ya tienen registrado una veintena de árboles caídos, de los cuáles cinco impactaron sobre casas linderas.
Las cuadrillas municipales que trabajan intensamente en las calles suman unos 150 operarios convocados de emergencia, como así también maquinaria privada que colabora para sumarse a las que pertenecen al Municipio, con el fin de acelerar las tareas con retroexcavadoras, camiones, y bombas de agua.
Cabe destacar, que el propio intendente Carlos Vignolo asumió el rol de coordinar y supervisar el accionar del Municipio ante esta emergencia, por lo que se encuentra recorriendo los distintos lugares afectados.
Sábado, 28 de noviembre de 2009