El gobierno argentino dispuso esta mañana implementar de inmediato una "mesa de crisis" conformada por autoridades de la Cancillería, el Ministerio de Defensa, el Ministerio de Salud y el Ministerio de Desarrollo Social para coordinar la ayuda humanitaria destinada a Haití.
"El objetivo de esta mesa de crisis es coordinar la ayuda humanitaria que desplegará el gobierno argentino en Haití, además de participar de la evaluación constante de los daños y necesidades", confirmó una fuente de la Cancillería argentina.
La fuente adelantó que "también se seguirá paso a paso y con la máxima información disponible la evolución de esta catástrofe que azota a Haití y la situación de los argentinos que viven allí".
Entre los muertos se encuentra el cabo de la gendarmería argentina Gustavo Gómez, de 33 años-, el derrumbe de decenas de edificios públicos, hospitales, escuelas y casas; además del colapso de los servicios de emergencia que están desbordados y el corte de los suministros de electricidad y agua, lo que grafica la gravedad de la situación.
El sismo, de 7,3 grados en la escala Richter, que ocurrió a las 17.53 (18.53 de la Argentina) con epicentro a 15 kilómetros de Puerto Príncipe -que cuenta con una población de unos 800 mil habitantes- fue seguido de dos réplicas de 5,9 y 5,5 grados.
El primer ministro haitiano, Jean-Max Bellerive, estimó que más de 100.000 personas podrían haber muerto en el peor terremoto que sufrió la isla en 150 años.
El premier indicó de todas formas que la cifra de víctimas podría ser aún más alta.
Bellerive dijo que los daños son muy grandes, aunque el aeropuerto de la capital Puerto Príncipe permanece abierto a pesar de los problemas, según informa la agencia alemana DPA.
El devastador terremoto en Haití afecta, según estimaciones de la Cruz Roja, a unos tres millones de personas, dijo hoy en Ginebra Peter Conneally del Comité Internacional de la Cruz Roja (ICRC).
Naciones Unidas informó que ha movilizado unos 30 equipos de ayuda internacionales para el país caribeño. Elizabeth Byrs, de la Oficina de Coordinación de Asuntos Humanitarios de Naciones Unidas (OCHA), señaló que los proyectos de ayuda se desarrollan con gran dificultad.
"La prioridad ahora es la ayuda a los heridos y preparar refugios", dijo la portavoz de OCHA, según informa DPA.
El CICR señaló que también está activo en la región afectada. Decenas de trabajadores trabajan allí en la medida de lo posible en los hospitales, desbordados con pacientes.
Personal de las oficinas regionales de la ONU en Panamá partió en dirección a la República Dominicana, allí donde hay medios de ayuda disponible. República Dominicana es la nación vecina de Haití en la isla de La Hispaniola.
El CICR dispone de suministros de emergencia en la región. "El suministro básico ha dejado de existir, así como las conexiones telefónicas, el suministro de agua y la atención médica", señaló Simon Schorno de CICR.
El Programa Mundial de Alimentos (PMA) señaló que ya envió alimentos para unas 30.000 personas. Para que la ayuda llegue a los necesitados se tienen que habilitar a la mayor brevedad posibles carreteras y puentes para que se pueda transitar por ellos. Aunque el aeropuerto está abierto, las vías de acceso están bloqueadas, al igual que las de los puertos, se apunta desde el PMA.
Miércoles, 13 de enero de 2010