La Presidenta sostuvo que "el yugo de hoy es la pobreza" al mencionar los 200 años de la gesta libertadora. Además, sobre su visita a Perú dijo que "es un desagravio en nombre de todos los argentinos a esta hermana República".
La Presidenta sostuvo que "el yugo de hoy es la pobreza" al mencionar los 200 años de la gesta libertadora. Además, sobre su visita a Perú dijo que "es un desagravio en nombre de todos los argentinos a esta hermana República", en alusión a la venta ilegal de armas al Ecuador que se realizó durante la gestión de Carlos Menem.
La presidenta, al pronunciar un discurso junto al mandatario peruano Alan García, instó a "dar un segundo combate, el combate contra la desigualdad y la pobreza".
"Nuestra región debe convocar a nuestras centrales de trabajadores y de empresarios, a las universidades para entrecruzar toda esa fuerza para ese objetivo que es la segunda liberación para terminar con el flagelo de la pobreza y lograr el desarrollo armónico de nuestras sociedades", sostuvo.
Al señalar que no se debe incentivar una carrera armamentista, afirmó que "los que crean que garantizar la paz con las armas están equivocados, la paz se garantiza con equidad, con mejor distribución del ingreso, con sociedades educadas, ese es el verdadero combate y las armas son la unidad de América del Sur y profundizar un proceso de crecimiento".
Cristina indicó que su visita al Perú "es de desagravio en nombre de todos los argentinos a esta hermana República desde la historia".
"Por eso la decisión de venir aquí a superar viejos episodios que no vale la pena mencionar, pero que hirieron a los peruanos que con un gesto único por Malvinas pusieron a nuestra disposición aviones, pilotos y misiles para combatir junto a nuestros hombres por la dignísima tarea de rechazar el último enclave colonial en América del Sur que nos avergüenza a todos en este mundo contemporáneo", acotó.
En ese sentido, dijo que "siento que estoy cumpliendo un mandato de todo el pueblo argentino y reafirmando la importancia que tiene consolidar la unidad de la región".
La Presidenta sostuvo que las diferencias entre los países no deben ser "un impedimento para profundizar una unidad que es la que permitió hace 200 años la liberación del yugo colonial".
"Hemos comprendido que el mercado no lo soluciona todo, necesitamos del Estado para dar las respuestas a millones de americanos que siguen demandando. Ese debe ser el compromiso de todos los que creemos que tenemos en la unidad la fuerza más importante para ofrecerle al mundo", finalizó.
Martes, 23 de marzo de 2010