La presidenta Cristina Fernández de Kirchner aseguró ayer que desde el comienzo de la gestión de Néstor Kirchner "las decisiones las toma el presidente desde la Casa Rosada y no se las impone nadie desde otro lugar" y sostuvo que la defensa nacional "no puede tener color ni bandería política".
"La defensa nacional no puede tener color ni bandería política, es una decisión estratégica nacional para profundizar la soberanía", señaló Cristina, quien añadió que al seguir esa línea "demostramos que se puede lograr otro modelo de país, de desarrollo económico, de inclusión social, de soberanía e incorporación al mundo".
La Presidenta sostuvo que "no hay independencia si no hay una sólida economía para tomar decisiones como se hicieron en estos 8 años", y destacó que "hemos demostrado que podíamos tener y adoptar decisiones propias".
"Lo más importante de estos ocho años de gestión es que las decisiones las toma el presidente desde la Casa Rosada y no se las impone nadie desde otro lugar", aseveró Cristina, quien recordó que cuando era legisladora vio "que se votaba cualquier cosa en contra de los intereses del país porque si no se hacía lo que decía el Fondo Monetario Internacional se derrumbaba el mundo".
La primera mandataria formuló declaraciones ayer en la localidad santacruceña de El Calafate, al encabezar la celebración del 134 aniversario del bautismo del Lago Argentino por el perito Francisco Moreno, la inauguración del paseo costero "Néstor Kirchner" y el natatorio municipal.
En su discurso, Cristina hizo hincapié en la necesidad de reafirmar el compromiso de todos los argentinos para construir un país sobre "la base de la unidad nacional" y recordó las transformaciones logradas en los últimos ocho años, que apuntan a integrar el país.
"Junto a todas estas cosas de la defensa nacional, de una estrategia y una convicción para construir un país, tiene que estar también como base la unidad nacional", puntualizó la Presidenta y criticó a quiénes "son voceros y actores" de intereses externos.
En ese contexto, dijo que "no hay posibilidades de desarrollo si todos no tenemos ese objetivo de tirar para un mismo lado y saldar nuestras diferencias como buenos demócratas y luego que pasan las elecciones empujar para el mismo lado".
"No hace falta que pensemos igual los argentinos, que tengamos un pensamiento idéntico sino honestidad intelectual a la hora de discutir y defender siempre los intereses de la Nación y el pueblo. Esa es la verdadera soberanía nacional y popular. Eso nos tiene que unir a los argentinos", puntualizó.
Para Cristina, su desafío es que la política que llevó a este modelo de desarrollo "no dependiera de quien estuviera en el gobierno" sino "fijar políticas de Estado para que todo un pueblo sienta que el camino iniciado no podrá ser desviado, porque sería muy feo, y muy triste, volver marcha atrás".
"Nos pasó en otros momentos: desandamos ese camino, por intereses que no son los nacionales, pero debemos decirlo con todas las letras, con la ayuda desde adentro, porque sería injusto además de fácil querer colocar la responsabilidad de nuestras desventuras solamente en intereses externos, para que éstos triunfen siempre tienen que encontrar voceros y actores internos", dijo.
En la oportunidad, la Presidenta tuvo un emocionado recuerdo del ex presidente Néstor Kirchner, al destacar que "es la primera vez que estoy junto a ustedes y él no está. Debe habernos acompañado por ese natatorio por el que tanto habló y tanto soñaba" y convocó a que "sigamos los ejemplos de aquellos que dieron todo por el país".
"Imitemos esos ejemplos, de gente que entregó su vida por lo que pensaba. Es muy difícil encontrar en los tiempos que corren gente que deje de lado lo personal y se aboque con todo a la construcción de un país, muchas veces en eso se va la vida y hubo muchísimos argentinos a los que se les fue la vida imaginando un país diferente", afirmó.
En el acto estuvieron presentes el gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta; el intendente de El Calafate, Héctor Belloni; los ministros de Planificación Federal, Julio De Vido, y de Turismo, Enrique Meyer y el secretario de Obras Públicas, José López.
Miércoles, 16 de febrero de 2011