Roma (30-3-18): Miles de feligreses se hicieron presentes en uno de los espectáculos de fe más grandes de la Iglesia Católica. Hubo fuertes medidas de seguridad.El papa Francisco presidió este Viernes Santo el tradicional Via Crucis en el Coliseo de Roma, el sexto de su pontificado, ante una masiva concurrencia de feligreses.
gran cantidad de efectivos de seguridad tras la sospecha de terrorismo. Las medidas de seguridad fueron elevadas en todos los puntos turísticos centrales de Roma en la que se desplegaron unos 10.000 efectivos.
Horas antes de presentarse en el Coliseo de Roma, símbolo de la persecución de los primeros cristianos, Francisco ofició la misa del día en la Catedral de San Pedro en el Vaticano en la que recordó el padecimiento y la muerte de Jesucristo.
En el inicio de la liturgia el predicador de la casa pontificia, Raniero Cantalamessa, quien suele pronunciar el sermón del Viernes Santo, se centró este año en la juventud por lo que llamó a los jóvenes a mezclarse entre los que sufren pues, según señaló, así podrán liberarse del principio que gobierna el mundo, el del "puro egoismo".
Las solemnes celebraciones coinciden con una nueva polémica sobre comunicaciones en el Vaticano que trascendió luego que se reportara que el papa dijo el infierno no existe.
Origen de la tradición
Según la creencia cristiana, Jesucristo fue detenido, torturado y condenado a muerte por Poncio Pilato la noche previa al Viernes Santo. La crucifixión es el momento central del Viernes Santo. En el tercer día después de su muerte, el Domingo de Pascua, Jesucristo resucitó, según la creencia cristiana. La Pascua es por lo tanto la fiesta central del cristianismo.
También en Jerusalén miles de peregrinos católicos participaron hoy en la procesión de Viernes Santo por la ciudad vieja hasta la iglesia del Santo Sepulcro, encabezada por los monjes franciscanos encargados de custodiar la basílica. Los fieles recorrieron la Via Dolorosa hasta el lugar. También creyentes evangélicos peregrinaron por la mañana a la Iglesia del Redentor en Jerusalén.
Según la tradición cristiana, Jesús fue enterrado en la iglesia del Santo Sepulcro y fue allí donde resucitó. El sábado y domingo de Pascua se celebran allí misas.
Este año el Viernes Santo coincide con el inicio de la pascua judía o Pésaj, y como también es una festividad de peregrinación se espera la presencia de muchos visitantes judíos en Jerusalén.
A pocos minutos caminando del Santo Sepulcro se encuentra el Muro de las Lamentaciones, el lugar más sagrado del judaísmo. El Pésaj recuerda la huida de los israelitas de Egipto, donde eran esclavos.
Las iglesias ortodoxas celebran la Pascua dentro de una semana, debido a que católicos y protestantes se rigen por el calendario gregoriano, pero los ortodoxos según el juliano.
Viernes, 30 de marzo de 2018