San Paulo (6-4-18): Multitudes se concentran en distintos puntos del país con los ojos puestos en San Pablo y, sobre todo, en la Policía, que a las 17 de hoy (hora de Brasil) iría a detener al expresidente. Centenares de miles de personas marchan y se concentran en distintas ciudades de Brasil, principalmente en las afueras de San Pablo y cerca de la residencia de Luíz Inácio Lula da Silva, como forma de protección al exmandatario y como un intento de frenar la inminente detención ordenada por el juez Sergio Moro. Esto es Brasil ahora el pueblo en las calles a favor de LULA #LulaLivre pic.twitter.com/eptNtAA8jE Impresionante vigilia junto a @LulapeloBrasil en la puerta del Sindicato de São Bernardo do Campo, no cabe un alfiler y todos se mantienen unidos en defensa de la democracia (📸@MidiaNINJA) pic.twitter.com/w5b7taZr5s VIDEO | Marchas en apoyo a @LulapeloBrasil en la Explanada de los Ministerios, la principal avenida de Brasilia (Vía @PTnaCamara) pic.twitter.com/wrPWSe6UDE Esto es Brasil ahora el pueblo en las calles a favor de LULA #LulaLivre pic.twitter.com/eptNtAA8jE
Desde el Partido de los Trabajadores (PT) llamaron a apoyar al líder político pero las movilizaciones ya habían sido autoconvocadas desde el minuto mismo en que el Tribunal Supremo rechazó antenoche el hebeas corpus que había presentado la defensa de Lula.
La principal movilización se produjo en Sao Bernardo do Campo, en el Sindicato de los Metalúrgicos, cordón obrero de San Pablo donde Lula se forjó como líder sindical.
La presidenta del PT, Gleisi Hoffmann, afirmó que la orden de prisión dictada contra Lula da Silva “reedita los tiempos de la dictadura” en Brasil.
“Es una violencia sin precedentes en nuestra historia democrática”, señaló Hoffmann en un mensaje divulgado en las redes sociales, que supuso la primera reacción de la dirección del PT a la decisión de la Justicia de intimar a Lula a presentarse para comenzar a cumplir la pena de doce años que le fue impuesta.
Lula, el líder más popular de Brasil, fue condenado por corrupción a nueve años de cárcel en primera instancia, una pena luego ampliada a doce años por un tribunal superior que hoy ordenó la ejecución de la sentencia.
Viernes, 6 de abril de 2018