El descubrimiento viene a confirmar que las culturas andinas del país no tuvieron su origen en las regiones selváticas sino en la costa norte.
Arqueólogos alemanes y peruanos han descubierto en Sechín Bajo, en el valle del Casma (norte de Perú), un gigantesco complejo monumental datado hace unos 5.500 años, que puede considerarse uno de los mas antiguos si no el más viejo de América. "Se trata de un hallazgo revolucionario y excepcional por la datación tan antigua", subrayó hoy en Berlín en una rueda de prensa el profesor de arqueología y embajador de Perú en Alemania, Federico Kauffmann-Doig, quien comentó que el enigma radica en averiguar ahora que función tuvo el complejo.
El descubrimiento viene a confirmar que las culturas andinas de Perú no tuvieron su origen en las regiones selváticas, como se pensaba hasta hace poco, sino en la costa norte del país, región en la que se presumen mas restos arqueológicos relevantes, añadió.
El director del proyecto de Sechín Bajo y arqueólogo alemán de la Universidad Libre de Berlín, Peter Fuchs, explicó que la zona de excavaciones abarca una superficie de 30 hectáreas con construcciones de varias épocas, las mas recientes de hace 3.600 años.
La construcción con patios redondos encontrada en los estratos inferiores de las excavaciones "puede considerarse la más antigua arquitectura monumental en el espacio andino central", dijo Fuchs, quien subrayó que fue levantada hace unos 5.500 años.
Sobre ella se erigió posteriormente, entre los años 2100 y 1600 antes de nuestra era, un edificio abierto, casi cuadrado, de unos 35 por 40 metros, con nueve salas alineadas de tres en tres, que pudieron haber tenido alguna función ritual.
Casi adosado a ese edificio se encuentra el hallazgo más interesante del complejo, una construcción de piedra y adobe de 125 por 150 metros en buen estado de conservación, que contiene cuatro patios interiores en línea y descendentes desde el más pequeño, arriba, al más grande, en la parte inferior.
Este último, el de mayor tamaño y con muros de unos 5 metros de altura cubiertos de adobe, se abre a una plaza de unos 20.000 metros cuadrados.
La excavación de ese patio ha sacado además a la luz relieves de gran tamaño en sus paredes, únicos en la región, con figuras en posición frontal, que tienen los brazos abiertos y parecen participar en un baile ritual o una procesión.
En la mano derecha sostienen un objeto alargado que podría ser una maza de guerra y de su izquierda cuelga una pieza redonda, también sin identificar, de la que surge una cabeza de serpiente. Los arqueólogos han limpiado hasta ahora tres figuras con la ayuda de un equipo de especialistas en restauración y consideran que podrían tener entre 3.900 y 3.700 años de antigüedad.
Fuchs explicó que la construcción monumental de Sechín Bajo, situada a 370 kilómetros al norte de Lima y en la región costera de Perú, fue abandonada intencionadamente por razones que se desconocen hace más de 2.500 años.
Sus responsables "tapiaron las puertas y derribaron las escaleras de acceso" sellando el complejo, dijo el arqueólogo alemán, quien comentó que quienes realizaron esa tarea llenaron de grafitos las paredes exteriores de la construcción con mas de 130 dibujos de animales, máscaras y otros objetos. "El más interesante de todos ellos es una especie de animal mitológico, mezcla de caimán, felino y araña, que podría ser el anuncio de una nueva concepción del mundo y que se ha repetido de manera similar en numerosos hallazgos arqueológicos repartidos por la región andina", explicó Fuchs. "No sabemos que función tenía el complejo", señaló por su parte el profesor Jürgen Golte, "solo sabemos que no se trataba de una residencia y que tenía una función pública", posiblemente con fines rituales.
El equipo de arqueólogos del Instituto de Latinoamérica de la Universidad Libre de Berlín considera que el asentamiento de Sechín Bajo pudo tener entre 8.000 y 10.000 habitantes que vivían de la agricultura en las riberas de los ríos cercanos.
Viernes, 11 de julio de 2008