Sabíamos que el sexo es positivo porque es una forma de conseguir placer físico pero... ¿sabes cuáles son las virtudes del sexo?Nos encanta saber todo sobre el sexo. Desde cómo descubrir nuevas formas de placer hasta cuáles son las partes positivas de tener un orgasmo (o varios los más "suertudos") cada día. Sobre el sexo se ha dicho tanto y de todo que a veces nos cuesta distinguir lo que es cierto de lo que no.
Por eso, hoy queremos contarte cómo el sexo puede mejorar tu vida... ¡Sigue leyendo y descubre otros motivos por los que practicar el sexo a diario es saludable!
Quita el miedo
La Universidad de Groeningen, en Holanda, realizó una investigación en la que pretendía indagar un poco más acerca de ese "apagón" que se produce en nuestros cerebros cada vez que tenemos un orgasmo. Utilizando un escáner de cuerpo completo estudiaron las reacciones del cuerpo antes y después del clímax.
Así pudieron descubrir que durante esos breves pero intensos segundos que dura el orgasmo las regiones del cerebro relacionadas con el miedo y la alerta se apagan, explicando así esa sensación que tenemos que va más allá del relajamiento. O sea, que el orgasmo hace que entremos en una especie de trance que nos aleja a más no poder de cualquier sensación de miedo o ansiedad. En consecuencia, se recomienda a las personas que sufren de estrés que practiquen el sexo habitualmente ya que nos transporta a un estado casi primitivo...
Quema calorías
El sexo, como cualquier ejercicio físico, nos ayuda a mantenernos en forma y a quitar esos kilitos de más que hemos cogido en la romántica cena pre-coital... Pero hay que tener en cuenta diferentes variables: la duración del acto en si, la postura (si te pones "de patas abiertas" tumbada en la cama probablemente no te pongas muy en forma), los movimientos que realizamos... Pero aunque seas tú la parte "pasiva" de la pareja durante la relación (vaya, la que no se mueve hablando mal y pronto), debes saber que la aceleración de los latidos del corazón, los jadeos, la aceleración de la respiración, las contracciones musculares y espasmos así como el orgasmo en sí mismo llevan consigo un gasto considerable de energía.
Según los expertos, en una relación sexual de 20 minutos (una larguita, pues la media de aguante está en 11 míseros minutos) se queman alrededor de 150 calorías. Y no sólo eso. Una mala relación sexual poco satisfactoria puede llevarnos a intentar compensar esas carencias comiendo ciertos alimentos de manera compulsiva (por ejemplo, el chocolate). Por lo tanto, si tienes un buen sexo no necesitarás ponerte hasta las cejas de chocolate para subir tu nivel de endorfinas (esa sustancia que se dispara cuando tenemos un orgasmo y hace que nos sintamos más felices). Así que ya sabes, si quieres perder peso de una forma sencilla y de un modo bastante más placentero (y más barato) que sudando en el gimnasio... ¡a practicar sexo!
Somos más felices
Si sumamos los factores de que el sexo quita el miedo y de que adelgaza, obtenemos un tercer beneficio importantísimo que mucho tiene que ver con los anteriores: el buen sexo nos hace más felices. Según los expertos, en general practicamos poco sexo. El estrés y el modelo de vida que llevamos hacen que cuando llegamos a casa no nos apetezca demasiado ponernos al tema. Pero aquellos que tienen la suerte de practicar mucho y muy buen sexo se declaran como personas más felices. O sea que el dicho ese de "está amargado porque hace mucho que no echa un buen polvo" lleva bastante razón si atendemos a las reacciones químicas y físicas que se producen en nuestro cuerpo cuando tenemos un orgasmo. Y es que en el momento del clímax se liberan un montón de endorfinas, unos analgésicos naturales que nos ayudan a tener una sensación de satisfacción e incluso nos quitan los males físicos. Las endorfinas se liberan también cuando nos reímos, así que si nos reímos durante el coito o después del orgasmo, ¡nuestra salud mental mejorará muchísimo!
Miércoles, 2 de septiembre de 2009